¿Estás malcriando a tu hijo? 6 claves para que tu hijo sea feliz

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• Si nos detenemos a pensar en el término "malcriar" deducimos que viene del concepto "criar mal". ¿Y qué sería criar mal a un hijo?. Nadie tiene la fórmula para ser el padre perfecto, de hecho el camino de la paternidad y maternidad es un camino que se hace al andar. Pero hay una clave que engloba a todos los consejos que podamos llegar a recibir, y esa clave es el amor.
• Las consecuencias de malcriar a un niño pueden ser diversas y podrían llegar a convertirse en un dolor de cabeza. No nos confundamos, brindarle todo, absolutamente todo lo material para que no carezca de nada, ayudarlo y hacer las cosas por él, no cumplir con las promesas o no prestar atención a sus berrinches para que "aprenda" no nos lleva por buen camino. Educar a un niño bajo límites estresantes, gritos, malos ejemplos y desinterés puede derivar en un niño poco feliz, inseguro y siempre deseoso de la aprobación de los demás.
  Aprende  a incorporar a tu vida cotidiana las acciones que llevarán a tu hijo a ser una persona feliz.

• 1. Brinda el ejemplo:

  hay una frase que dice "la palabra convence, el ejemplo arrastra". Si le insistes a tu niño en lavarse los dientes cada noche, en saludar con amabilidad a los mayores, en no gritar a su hermano o en pedir disculpas, hazlo tú primero. Como padres, debemos mostrar con el ejemplo y ellos sólo nos imitaran. Acompaña sus actos con la palabra, pero siempre demuéstrale con hechos las cosas que están bien. Nada es tan contagioso como el ejemplo.

• 2. Manifiesta interés:

  Los niños son adultos en potencia. Necesitan el apoyo y la seguridad de sus padres. Es fundamental compartir con ellos momentos de conversaciones, donde te cuente qué hizo en el día, o si hay algo que lo aflige. Presta atención a su comportamiento y verás que tu hijo confiará en que eres un refugio donde ir cuando necesite contención.

• 3. Explica los por qué:

  Nunca es aconsejable decirle a un niño "porque yo lo digo, y punto". Existen otras formas de imponer autoridad. Reemplaza esa frase con alguna explicación lógica de por qué no puede hacer tal o cual cosa. Con esta forma de actuar le estás mostrando respeto, pero con firmeza y autoridad. Y tarde o temprano el niño aprenderá que lo que hagas, será por su bien.

• 4. No compares:

  Las comparaciones son tediosas, y alimentan la inseguridad del niño. Busca otros caminos para alentar a tu hijo. En vez de decir "tu hermano a tu edad ya hacía tal o cual cosa" prueba con un "yo sé que pronto podrás hacerlo". De este modo alimentas su autoestima y su confianza en sí mismo.

• 5. Dí que no de vez en cuando:

  Un "no" a tiempo, aunque te sea difícil y doloroso, puede ayudarlo a futuro. Ante reiteradas negativas tu hijo se mostrará desconforme, hará berrinches y se enojará contigo. Pero si dices que sí a todo lo que él pide, no estarás ayudando a que el niño aprenda a ser tolerante y le costará mucho lidiar con las frustraciones de la vida. Di "no" a tiempo con sus debidas explicaciones.
  6. No contradigas a tu pareja:
• Es imprescindible que ambos padres estén de acuerdo en la forma de crianza, en lo permitido y lo no permitido. Si mamá que está todo el día con los niños en casa no permite que el niño suba la escalera solo, y luego llega el padre y lo permite, no están dando un buen ejemplo. "Papá me deja hacer esto", "mamá me deja hacer lo otro" suelen ser frases cotidianas de algunos niños. Demuéstrale a tu hijo que las reglas en casa son claras y que hay una unidad básica -mamá y papá- que siempre tomarán decisiones en conjunto y sintonía para el bienestar de todos en el hogar.
  Todos queremos que nuestros hijos sean felices. Criar y educar a los adultos del mañana es uno de los mayores desafíos del ser humano. Lo importante es discernir cuándo vamos por mal camino y desviar nuestro rumbo hacia las buenas costumbres y hábitos para lograr el objetivo de criar con amor.