El tema de la infidelidad nunca dejará de ser intrigante pues según el dicho popular "no hacen o hacemos" y tal vez de ahí nuestro gran interés por saber el cómo o el por qué algo que lastima tanto pueda suceder tan frecuentemente. Imagina que, según una encuesta hecha por el Centro Nacional de Investigación de Estados Unidos, el 20% de los hombres y el 10% de las mujeres fueron infieles alguna vez.
Y por lo regular, siempre los varones tiene los índices más altos.
Vix hizo público un estudio realizado por la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología donde entrevistaron a 92 parejas heterosexuales con relaciones de pareja de aproximadamente 2 años, les presentaron situaciones hipotéticas sobre infidelidad y luego les preguntaron cómo se sentirían.
Tras analizar los resultados, los investigadores encontraron que la infidelidad puede ser de dos maneras:
Infidelidad emocional
Según
Vix se considera infidelidad emocional cuando una de las partes comienza a sentirse atraída por otra persona, hasta tener una relación muy cercana, no hay mayor contacto físico pero sí algo emocional pero que nadie reconoce como un engaño como tal.
Este tipo de infidelidad la mujer la identifica como grave pues implica sentimientos y el compartir cosas muy personales.
Según el estudio, las mujeres consideran una infidelidad grave el coqueteo, bailar con otra persona en una fiesta y por lo tanto difícil de perdonar y olvidar; mientras que los hombres ven lo mismo de una manera totalmente diferente, piensan que es algo que simplemente puede pasarse de largo y no hay mayor problema.
Infidelidad sexual
Aquí los hombres son quienes ponen "el grito en el cielo". Ellos pueden tolerar todo excepto que su pareja haya tenido relaciones íntimas con alguien más. Curiosamente ellos piensan que su pareja perdonarán la infidelidad emocional más fácil que una noche de solo sexo y es justamente lo contrario.
La percepción tan diferente entre hombres y mujeres es justamente de dónde se derivan los grandes problemas de la infidelidad en las parejas.
Es por esta razón y muchas otras, que las parejas deben de hablar de este tema y dejar saber al otro lo que piensan con claridad a fin de estar enterados, aclarados y advertidos ¡ah! Y no ser infiel.
Ahora, sin importar el tipo de infidelidad que estás viviendo o enfrentando, es necesario reconocer que como pareja o matrimonio, algo está faltando, ambos están dejando de dar o de recibir, atención, afecto y hasta cercanía. Es necesario que hablen, se entiendan y se pongan a trabajar si en verdad desean continuar con la relación y sobre todos, si aún se aman.
Confesar o no confesar una infidelidad
Según los especialistas, si se está hablando de una infidelidad emocional, no es necesario ni siquiera mencionarlo para evitar lastimar de manera innecesaria a la pareja, que lo importante es dejar al "amiguito" o "amiguita" de lado y concentrarse en mejorar la relación de pareja que se tiene.
Y si estamos hablando de una infidelidad sexual, pues no hay mucho que decir, solo tú sabes la respuesta correcta en ambos casos.
Por eso lo mejor, siempre será evitar en este predicamento.
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